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Ansell Ltd. abril 14, 2023

La necesidad de la calidad de los guantes en la industria de fundición

La industria de la fundición posee un elevado riesgo de quemaduras y abrasiones. Unido a este fenómeno, hay que atender también a cómo se manifiestan, es decir, su elevada diversificación. Los guantes, como medio de protección manual, constituyen la base de una adecuada política de prevención de riesgos laborales.

Los riesgos presentes en la fundición

En primera instancia, cabe destacar cómo las necesidades del sector han ido cambiando. La introducción de nueva maquinaria ha provocado una creciente necesidad por otorgar medidas de protección adicionales. Una de ellas es, precisamente, la cobertura manual, teniendo en cuenta que las manos son la parte más expuesta.

La utilización de hornos puede entrañar un cierto riesgo de combustión espontánea. Cuando se emplean metales delicados con una compleja composición química, es posible que el trabajador desconozca el peligro. Las consecuencias llegan a ser fatales cuando alcanzan partes vitales, por lo que la cobertura integral es prioritaria.

El riesgo de salpicaduras, por su parte, también se hace presente en procesos como la transformación de materias primas. Por ejemplo, el hierro candente supone un elevado peligro cuando pasa a estado fluido o líquido. Esta circunstancia es todavía más delicada cuando se trata de piezas con pequeño tamaño que pueden saltar a grandes velocidades.

Las lesiones suceden en cualquier entorno, pero adquieren una especial relevancia en el ámbito de la fundición de metales. La presencia de hornos y conductos a alta presión genera un efecto calorífico en el suelo. Como consecuencia, una caída o deslizamiento de un empleado ocasiona quemaduras o desgastes en la piel de las manos a mediano plazo.

Respecto a la radiación, no hay que obviar el efecto que causan los rayos ultravioleta. Cuando el metal alcanza altas temperaturas, empieza a emitir en esta onda. La exposición constante causa problemas de visión, entre los que las cataratas se posicionan como los más frecuentes. En este sentido, la empresa es responsable si no otorga la debida protección.

De lo anterior se puede extraer otro riesgo que, esta vez sí, suele recibir mayor atención. Las chispas que provoca la fricción de metales candentes tienden a saltar de manera descontrolada. El contacto con las manos llega a producirse de un modo casi constante y, a largo plazo, desencadena una pérdida de sensibilidad en la epidermis.

Protección manual frente a los riesgos en la fundición

Para el objetivo de minimizar el peligro que entrañan los procesos más comunes en la fundición, la protección manual resulta imprescindible. Los guantes de protección personal en la industria de fundición de metales que fabrica Ansell disponen de cerraje anticalórico. Este medio se ha consolidado por su elevada eficacia en entornos delicados como este.

De igual modo, cuentan con una cobertura densa que aumenta la protección en zonas sensibles. Las muñecas o las puntas de los dedos son las partes más expuestas. Las primeras, de hecho, son fundamentales al trabajar con piezas de pequeño tamaño y someterlas a elevadas temperaturas.

Relacionado con lo anterior, es conveniente minimizar el riesgo de desprendimiento de objetos. La propia movilidad de las manos suele hacer que se caigan y entren en contacto con entornos inflamables. Para evitarlo, los guantes para industria en áreas de fundición incluyen recubrimiento con microtexturizado, que refuerza el agarre.

Mención aparte merecen procesos todavía más sensibles, como la soldadura. Los guantes de Ansell disponen de aplicaciones en múltiples ámbitos, como las modalidades MIG y TIG, la soldadura de tipo A o al arco. Protegen frente al riesgo de contacto con chispas y otorgan una mayor cobertura gracias a las mangas y su cierre en puño.

El proceso de desmolde es otro de los que más peligro suele suponer. Hay que tratar directamente las piezas, lo que requiere un contacto manual que es muy perjudicial cuando no se efectúa con protección. Como solución, un guante de seguridad para fundición debe poseer cobertura metálica o aluminizada, que evita la conducción del calor hacia la epidermis.

Por otro lado, Ansell también ha diseñado trajes de protección personal para áreas de fundición. Disponen de resistencia frente al riesgo de corte, desgarro y perforación, por lo que otorgan seguridad mecánica. En este sentido, incluyen capas de diferentes materiales como serraje o cuero, telas aluminizadas, algodón o KCA (Kevlar - Carbon), que no son tan propensas a romperse bajo condiciones de exigencia técnica y dinámica.

La protección corporal para áreas de fundición de Ansell, igualmente, dispone de otras prestaciones fundamentales. Entre ellas, destacan las siguientes:

  • Cobertura ante la persistencia de las llamas.
  • Resistencia frente al contacto con fuentes de calor.
  • Protección ante el riesgo de salpicaduras con metales en estado líquido o metal fundido.
  • Cobertura frente a posibles expulsiones de metal fundido.

Como se ha comentado, los guantes para la industria minera son esenciales. Hay que reducir las probabilidades de tener un accidente en procesos delicados y minimizar el impacto que pueda tener. De esta manera, las manos del trabajador, que son la parte más expuesta, estarán seguras y contarán con una adecuada cobertura.